viernes, 31 de julio de 2020

LA MADRE DEL ARZOBISPO DE SUCRE partió a la casa del padre



Juana Gabina Guzmán Cruz Vda. de Centellas,  madre del nuevo Arzobispo de Sucre y presidente de la Conferencia Episcopal de BOLIVIA, mujer devota en la fe   católica, un 7 de noviembre de 1962 dio a luz  a Monseñor Ricardo Centellas en Suquistaca, Nor Cinti  de la Arquidiócesis de Sucre. Consagrándolo para  la vida y el servicio sacerdotal en 1988. Fue rector del Seminario de San Cristóbal en 1993 e inició su ministerio pastoral como Vicario en la Parroquia San Juan Bautista del municipio de Padilla. Luego en 1998 pasó a ser Vicario General de Sucre.  Nombrado  Vicario General de la Arquidiócesis de Sucre en  2005. Actualmente en  junio de este año  fue consagrado ARZOBISPO de la Arquidiócesis de Sucre, la jurisdicción eclesial donde nació e inicio su camino  de  vida consagrada en compañía de su madre.

A la edad de  88 años, cumplidos  el pasado 30 de mayo, fue madre de 9 hijos, mujer ejemplar dedicada y entregada a su familia; Doroteo (+), Pedro, Hugo, Edwin, Ricardo, Marina, Lourdes, Elisabeth y Yolanda Centellas Guzmán .

 Llegó a Sucre desde Cochabamba  para compartir y ver a su hijo posesionado  como Arzobispo, lugar donde falleció  de  un paro cardíaco  al promediar las 11:00 de la mañana en la casa del  Arzobispado de Sucre, su cuerpo es velado en la capilla y por las restricciones  de encapsulamiento que vive el municipio de Sucre se realiza una misa y velatorio  a puertas cerradas   con la presencia de sus hijos  e hijas .  La eucaristía en sufragio de su alma, será a  las 09:00 de la mañana, posterior entierro en el Cementerio General.

En la vocación de sus hijos, se evidencia la mano de esta madre, tal es el caso del   Delegado de las Comunidades Educativas de la Iglesia Local (CEIL SUCRE),  Lic. Hugo Centellas y el Padre Pedro Centellas que cumple su trabajo pastoral en la Diócesis de Potosí.

"La divina providencia ha hecho  de que ella insista y venga a visitar a Mons. Ricardo y a la familia de  Sucre..,  hemos tenido la satisfacción y dicha de compartir los últimos días", Lic. Hugo centellas, quien la recuerda como madre ejemplar, trabajadora luchadora y constante que gracias a ella "nos consideramos buenos cristianos católicos".

"Que nuestro Arzobispo se sienta acompañado" por la IGLESIA DE SUCRE, fueron las palabras de Pbrio.  P. Enrique Quiroga, Vicario de Pastorales.

El responsable de la Vicaria de Pastoral de la Arquidiócesis de Sucre a nombre de la Iglesia Local, hace llegar sus oraciones y cercanía con Mons. Ricardo Centellas Guzmán, tras la partida a la gloria del padre de su Sra. Madre



31.07.2020//Sonia Muraña - CatólicaTV //

¿NO ES EL HIJO DEL CARPINTERO? ENTONCES, ¿DE DÓNDE SACA TODO ESO?, todo para la mayor gloria de Dios


31 de julio 2020, viernes de la 17ma. Semana durante el año litúrgico
Proclamamos el Evangelio según san Mateo 13, 54 - 58. 
Gloria a ti, Señor.  


 

REFLEXIÓN 

Queridos oyentes, la gente por un lado admira a Jesús y su mensaje: “¿De dónde saca éste esa sabiduría y esos milagros?” y por el otro lado chocan con su origen: “¿No es el hijo del carpintero? ¿No es su madre María?” Así estaba anunciado por el piadoso anciano Simeón en la Presentación del niño Jesús en el Templo (Lucas 2, 22-35) y así en todo el tiempo hasta hoy. A la gente es más fácil aceptar que Dios es Creador, también Legislador y autor de palabras de Sabiduría y también a un hombre de Dios que con el poder del Espíritu obra grandes milagros y enseña cosas grandes.

Queridos oyentes, hoy recordamos también a San Ignacio de Loyola. En Pentecostés del año 1521 una bala que le destrozó una pierna cambió el rumbo de este noble caballero. De soldado del rey de España fue el soldado de Cristo, fundador y primer General de la Orden de los Jesuitas, la Compañía de Jesús. Así esta bala perdida ha marcado la historia de nuestra Iglesia en todo el mundo, en Bolivia y de manera especial acá en Sucre con la fundación de la Universidad en 1624. En todo el mundo trabajó su Orden contra el Protestantismo y por la Reforma católica, la expansión misionera con las “reducciones jesuíticas” también en Bolivia, hoy por su arquitectura y su música patrimonio cultural de la humanidad; así como también por la educación cristiana de la juventud con los colegios. En la vida espiritual para todos son de gran importancia sus EJERCICIOS ESPIRITUALES con el discernimiento de espíritus, una experiencia que tenía cuando estaba recuperando de la grave herida de su pierna. Al leer libros caballerescos soñaba con aventuras y conquistar una dama de alcurnia pero al ver la realidad se sintió muy triste. Como no había de estos libros le daban la VIDA DE JESÚS y otro de VIDA DE SANTOS. Al leer y pensar en estas otras vidas sentía una alegría profunda que no cambió aunque mirando su triste situación. San Ignacio invita al examen del día pasado cada noche.

El lema de su vida y de su Compañía es “OMNIA AD MAJOREM DEI GLORIAM”, todo para la mayor gloria de Dios. Para eso se esforzaba e invita a todos al “MAGIS”, hacer todo “mejor”, es decir “en todo amar y servir”. Oremos con San Ignacio de Loyola a Cristo: “Que te conozca íntimamente a fin de amarte con mayor amor y seguirte con más diligencia”.

En este mes de julio que hoy acabamos recordamos una vez más la fundación de la Iglesia Diocesana de Sucre:” Te alabamos Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” (lema)

Con el Papa oramos por nuestras familias. Recordando la Preciosísima Sangre de Cristo rezamos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, salva a nuestras familias, y al mundo entero!  
 
El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo!         

 Y la Bendición del Dios uno y trino, del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo descienda sobre ustedes y les acompañe hoy  y siempre.

jueves, 30 de julio de 2020

ACCIÓN DE GRACIAS por los recuperados de covid en el Penal San Roque

Celebraron una Eucaristía de acción de gracias por los más de veinte personas recuperadas del covid- 19 en el Recinto Penitenciario de San Roque de la Ciudad de Sucre. 


Hace más de un mes, el Penal donde residen 650 privados, sufrió la propagación del virus al interior de la institución, afectando a más de cincuenta personas entre privados, efectivos policías y personal de régimen, donde además se perdió la vida de cuatro personas a causa del virus. Luego de llevar a cabo la atención sanitaria con medicamentos y dióxido de cloro en una primera etapa, la últimas    informaciones brindadas por el Director de Régimen Penitenciario, Edwin Aguilar, es la satisfacción del haber logrado controlar la propagación y el alta de 21 pacientes. Además, revelo que solo existe 12 personas aisladas.

Aguilar, también estuvo aislado varias semanas por portar el virus y fue dado de alta. 

 

La misa de acción de gracias fue por la recuperación de los pacientes entre privados de libertad, el personal de la policía y de régimen que se "han curado del Covid 19 y ya están plenamente recuperados y dados de alta..., pedir por la pronta recuperación de los enfermos y el eterno descanso de los fallecidos", P. José Miguel Marengo, Capellán del penal y responsable de la Pastoral Carcelaria en la Arquidiócesis de Sucre.

"La actividad religiosa ha sido en la entrada del Penal, con la participación del personal de Régimen, Policías de seguridad y los hermanos privados de libertad, participando desde los Pabellones". Al finalizar, en un momento especial, se dio "la bendición con agua bendita a todos, llegando también a los pabellones, con esa frase tan profunda y querida por todos: “que el Señor te bendiga, acompañe y proteja siempre”. Agradezco a las autoridades de Régimen y Seguridad, por estos momentos compartidos y celebrados, tan deseados y pedidos por ellos", indicó el P. Marengo. 

El Capellán destacó en trabajo conjuntos de todas las instancias, " y damos gracias por el trabajo en equipo, formado una verdadera comunidad, al servicio de la lucha contra el Covid19, que ha llevado a controlar y superar la pandemia en el Penal San Roque. Con la bendición de Dios y el compromiso de todos, en un esfuerzo común, de grandes sacrificios para los privados de libertad, y el personal, que también sufrió el contagio, se ha avanzado, viendo con esperanza los resultados, de curación de muchos de ellos. Seguimos orando y trabajando para que todo esto se supere definitivamente para bien de todos. También se agradece la gran solidaridad de las instituciones y vecinos de Sucre, por todo lo donado y compartido con el Penal”, afirmó el sacerdote por medio de su red social de Facebook.

Por su parte el Servicio Departamental de Salud (Sedes): “Hay tropiezos con una normativa internacional que restringe que los privados de libertad sean donadores", informó a la ABI el director del Sedes, Enrique Leaño.

También explicó que la intención de los internos es convertirse en un banco de plasma hiperinmune, sin embargo, aún no cuentan con ese consentimiento para poder habilitar a los internos del penal de San Roque como potenciales donadores de plasma durante la pandemia.

 


Por último, el día de hoy se llevará a cabo un Foro Virtual donde se presentará la experiencia de enfrentar el virus dentro del Penal a Hrs. 18:00 transmitido por Televisión Universitaria y su plataforma de Facebook 



3° COVERSATORIO: Laicos, nuestra vocación y compromiso misionero en tiempos de pandemia.

LA MISIÓN DE LOS LAICOS EN EL MUNDO

Foto: Equipo de rastrillaje de la Red Ciudadana
 de  lucha contra el covid


En el marco del día de la IGLESIA DIOCESANA y la semana del Laico, se llevó a cabo el tercer conversatorio  organizado por la Pastoral Social Cáritas, sobre la misión del laico en la Iglesia en tiempos de pandemia. 

Sistematización del conversatorio:


 La celebración del “Día de la Iglesia Diocesana” fortaleció nuestra identidad de Iglesia Sinodal en Salida Misionera; fortaleció la unidad, comunión y nuestro caminar misionero, ahora por terrenos difíciles, de una vida sumida en una crisis sanitaria por la pandemia. Como Iglesia y específicamente como laicos, nos urge meditar nuestra identidad, vocación y misión desde el contexto histórico que hoy vivimos. Vemos necesario profundizar y sintonizar nuestra tarea misionera y espiritualidad con los cambios que se han generado en nuestro mundo.

 El conversatorio inicia con una oración inspirada en el Evangelio de San Mateo 20,1-16. Palabra presente, donde el Señor nos invita a trabajar en su Viña, en el mundo actual que nos circunda, donde sus trabajadores se están enfermando y muriendo, están en situación necesidad y pobreza. Hay mucho trabajo que hacer y Jesús nos dice: qué hacen ustedes sentados, tranquilos, desocupados y sin hacer nada en la plaza, “vayan también ustedes a mi viña”. El Papa Francisco, en esta linea, nos dice “no valconeen la vida”, métanse a ella, “Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrase a las propias seguridades”. 

Para vivir con valentía y coraje este llamado que Jesús nos hace a los laicos y pidiendo la protección de Dios en esta tarea, terminamos rezando una oración por los laicos del mundo y así dar inicio a nuestro conversatorio orientado por tres preguntas: 

1. Cuáles son las circunstancias especiales que el mundo está viviendo hoy? 

- Una primera es la complejidad misma de este mundo, de la realidad que vivimos; que unos y otros pretenden simplificarla desde visiones o posiciones excesivamente particulares, cuando los polos desde donde urge hacer un acercamiento, son diversos. La complejidad del mundo y sus circunstancias, demanda una apertura a los diversos planteamientos y visiones que surgen de otros ámbitos como el científico, tecnológico, económico, político, religioso, entre otros; para poder entender y actuar en este mismo mundo complejo de manera integral y efectiva. Sin embargo, es necesario delimitar los diferentes aspectos de la realidad, para un actuar concreto, pero con una actitud de escucha de otros planteamientos y una mirada amplia que llega siempre más allá del ámbito propio. 

- Otra circunstancia a considerar es la globalización de los problemas. En el caso de la pandemia del coronavirus, no es un asunto local, sino global. No se ha quedado como una situación aislada, sino que su afección se ha globalizado. Esto, nos llama a considerar nuestro comportamiento humano destructor de nuestro hábitat y los efectos globales de nuestras acciones en contra del medio ambiente; los efectos globales de sistemas económicos con pretensión hegemónica; los efectos de intereses financieros, de poder y control mundial. - Un mundo católico con una diversidad de niveles de compromiso. Considerando la cantidad de bautizados, son pocos los que viven su compromiso de servicio eclesial y misión en los diferentes ámbitos de la realidad. Son pocos los que toman conciencia crítica de la realidad. Muchas veces, se reduce el compromiso y sensibilidad del laicado al entorno familiar; descuidando el clamor de una mayoría social que está demandando solidaridad, justicia, salud, libertad, derechos…Somos nosotros quienes ponemos fronteras a nuestra realidad y compromiso; lo que está más allá, no lo conocemos, y si es así, a veces, solo lo observamos. Esta actitud está presente en muchos laicos católicos bautizados. Podemos ver un laicado comprometido con la construcción de un mundo desde la voluntad de Dios; otros construyéndolo, motivados y absorbidos por ideologías, intereses personales o de grupo; y hay quienes son solo espectadores.

- La creciente indiferencia a la Iglesia, a su quehacer (liturgia, sacramentos, servicios…). La poca referencia al pensamiento social de la Iglesia; hasta una cierta censura a los temas religiosos, por parte de algunos políticos, periodistas, autoridades e investigadores. Preguntémonos: La Biblia, la DSI constituye referencia para el análisis soci-político, económico… para orientar la vida en estos ámbitos? A las nuevas generaciones les interesa la vida de la Iglesia? En este contexto de pandemia, por qué se abren fábricas, supermercados, bancos, negocios…, y no los templos de nuestras parroquias? Es que en una eucaristía hay mayor riesgo de contagio? No necesitamos alimentarnos del Cuerpo y Sangre de Cristo?. Se está comenzando a dar una tendencia de indiferencia e insensibilidad religiosa. El escenario posible de futuro: Una sociedad carente de valores, de principios y criterios ético-morales. 

2. De dónde surge nuestra vocación y compromiso misionero?

Los laicos, históricamente han pasado por diferentes niveles de participación, desde una pasividad en los actos litúrgicos, el aportan con sus limosna, ser ayudantes de la Iglesia, muchas veces sin la oportunidad de tomar decisiones para generar cambios en la misma. La renovación de la Iglesia ha estado reservada a la jerarquía. Sin embargo, esto se ha ido transformando, por el impulso de una nueva visión de los laicos, reflejada en documentos como la Christidelis laici, que afirma que los laicos deben vivir su espiritualidad y fe, en las realidades temporales: la familia, el trabajo, la política, el sindicalismo, entre otros ámbitos. La vocación particular de los laicos no se limita al ámbito estrictamente eclesial, sino lo puntual de los laicos es “ser un mejor padre, un mejor trabajador, político, sindicalista; un mejor profesional…desde nuestra espiritualidad cristiana”; así, estaremos viviendo nuestra vocación y misión en estas realidades temporales. 

Nuestra misión surge también, desde nuestra pertenencia a una comunidad de fe, la comunidad de discípulos formada por Jesús. Nuestra misión, nace desde la convivencia y comunión de los amigos de Jesús. Como fieles laicos compartimos el sentir de Jesus, su proyecto, su experiencia filial, su misericordia, su opción preferencial por los empobrecidos. Los laicos debemos compartir el alma de Jesús. Esta es nuestra fe, y desde esta fe, estamos llamados a ser luz y sal en el mundo, a anunciar la alegría del Evangelio de Jesucristo, a consolidar históricamente el Reino de Dios en los ámbitos de la vida personal, familiar, social, empresarial, política, económica, entre otros. Así mismo, estamos llamados a ser sujetos de renovación de nuestra Iglesia. Los laicos han de ser los protagonistas en el proceso de repensar y consolidar nuevos modelos de Iglesia, de parroquia, de pastoral. Por ejemplo, en la implementación de una pastoral digital, con la implementación de la tecnología. Una tarea, donde los laicos pueden aportar sus conocimientos profesionales, pero siempre desde nuestra identidad y espiritualidad cristiana. Los laicos reafirmamos nuestra vocación y misión en la fuente principal que es Dios Uno y Trino. Sin embargo, esta certeza se hace más compleja cuando el laico se pregunta por las razones individuales de asumir un nivel de compromiso. Si bien, el laico en un determinado momento de su vida, llega al conocimiento de su vocación y misión, esto no garantiza que lo viva con fidelidad en su cotidiano vivir. Esta conciencia de nuestra identidad, con los avatares de la vida se va diluyendo, lo que nos desafía a preguntarnos: Qué estamos haciendo para que los laicos vivan con fidelidad, lealtad y coherencia su identidad y vocación?. Por otro lado, en esta realidad tan compleja y diversa, los laicos se preguntan: El alimento de la espiritualidad cristiana de los laicos tiene como referencia exclusiva a los sacramentos o la vida dentro de la actividad de la Iglesia? Como explicar la dispersión de los jóvenes a convocatorias de orden religioso? Preguntas que invitan a pensar en otras realidades desde dónde pueden surgir la motivación de la misión de los laicos. La vocación y misión como laicos, tiene su sustento en nuestra identidad cristiana. Se es cristiano: laico bautizado, discípulo y misionero, solo desde el encuentro personal con Jesucristo Resucitado en la oración, en la Eucaristía, en su Palabra, en el hermano necesitado. Este encuentro es fundante en nuestra identidad; es la fuerza, el alimento para vivir con autenticidad nuestra vocación y misión en el mundo. Necesitamos decir: “soy cristiano político”, “soy cristianocomerciante”, “soy cristiano peluquero, técnico, banquero, profesor….”. El ser cristiano, la fe en Jesús, la comunión con Él, es el punto central de nuestra vida, es el punto de partida de nuestra identidad. Es nuestra identidad más radical. Podemos resumir entonces diciendo: Desde Jesús, desde la Iglesia… al mundo; a la acción en el mundo de la política, en el mundo de la economía, la cultura, al mundo del derecho y la justicia. De la palabra, a la acción en todas las circunstancias cotidianas. Los laicos estamos sumergidos en esta vida, en las realidades de este mundo secular. Pero lo importante no es ser laico, sino vivir nuestra identidad laical con el espíritu de Cristo Resucitado en todos los ámbitos de la vida. Nuestra misión es santificar las realidades de este mundo y continuadores de la obra redentora de Dios. 

3. Cuáles serían los ámbitos más urgentes de nuestra misión? 

El ámbito fundamental de la misión evangelizadora, que frecuentemente olvidamos, es “uno mismo”, nuestro interior, nuestra VIDA, nuestra mente y corazón. El primer lugar donde urge la presencia de Dios, es en nuestras propias vidas. Pues, como nos dice Jesus, ustedes son “Templos de Dios” “lugar de la presencia de Dios. Es desde nuestra interioridad de donde surge el amor, la misericordia, la justicia, el servicio, la entrega y compromiso. A este ámbito, le sigue la familia, bastión de la fe, del amor, de la esperanza, de la solidaridad y del bien común. Ámbito importante de nuestro servicio misionero como laicos, es nuestra Iglesia Arquidiocesana organizada en Vicarías, parroquias; organizada en áreas pastorales, instituciones, fundaciones grupos y movimientos eclesiales. Como laicos “somos Iglesia y amamos la Iglesia, entonces con gozo y alegría, debemos dedicar parte de nuestra vida a servir a Dios y a nuestros hermanos, a través de estas instancias eclesiales.

 Un ámbito de servicio de todo cristiano, es dentro de la dinámica y vida eclesial: la vida litúrgica; la vida sacramental; la vida en comunidad: diversidad de grupos con sus respectivos carismas; la vida sinodal, con ello nos referimos a la comunión y al caminar juntos, como Iglesia. El ámbito diverso donde los laicos ejercen sus funciones laborales, las realidades y lugares donde se encuentran para vivir su vida, su carisma, su oficio. Comenzando desde el propio hogar. Espacios donde el laico necesita dar testimonio. Realidades que nos están exigiendo un accionar más directo, concreto, genuino y de una incidencia real ante el sufrimiento de la gente concreta: por ejemplo, con los de la cárcel, los desvalidos de nuestras calles, los enfermos de coronavirus y sus familias. 

La respuesta a estos ámbitos es personal, pero también debe ser institucional. En este sentido, se necesita un trabajo conjunto y coordinado para una mayor incidencia en los ámbitos que están demandando la acción comprometida, no solo de los laicos, también de los sacerdotes. Ambos tenemos una misión compartida, tenemos una responsabilidad compartida. Juntos, unidos, encontrando un esfuerzo común, tenemos una presencia misionera, profética de mayor incidencia en esta y más allá de esta pandemia. Para concluir, nos alegramos por este conversatorio que ha reafirmado nuestra identidad y compromiso laical. 

Nos sentimos motivados a dar más de lo que hacemos, a dar un paso más hacia adelante como laicos jóvenes, mujeres, adultos…; asumiendo con gozo la invitación del Papa Francisco, a estar en primera línea en la vida de la Iglesia y la vida del mundo. Damos gracias a Dios por esta oportunidad de reflexionar y pidiendo su protección volvemos a la vida para seguir viviendo con mayor entusiasmo nuestra vocación y misión, ahora, en un mundo en Pandemia.

Jhony Montero 
PASCAR Arquidiócesis de Sucre

Foto: Jhony Montero,
firma inter-institucional de la Red Ciudadana
de lucha contra el covid


Mons. Adolfo Bittschi: “Señor renueva a tu Iglesia y comienza conmigo”, Iglesia somos todos y debemos dar testimonio de palabra y vida

“Bautizados y enviados”


30 de julio 2020, jueves de la 17ma. Semana durante el año litúrgico.
Proclamamos el Evangelio según san Mateo 13, 47 - 53. 
Gloria a ti, Señor. 


  REÚNEN LOS PECES BUENOS EN CANASTAS
 Y TIRAN LOS MALOS AL HORNO ENCENDIDO


La parábola de la red barredera guarda una relación muy estrecha con la de la cizaña sembrado entre buena semilla (vv. 24-30). El acento principal en ambas estriba en que la dinámica del Reino contempla la presencia de elementos positivos y negativos dentro de la misma comunidad cristiana y si somos conscientes, dentro de nosotros mismos está mezclado lo bueno con lo malo. Sin embargo, esta situación que los discípulos deben afrontar solo es pasajera, mientras dura el caminar hasta el fin del mundo (Mateo 28, 20), es decir, hasta que el Reino de Dios se manifieste con toda su plenitud. Mientras llega el discernimiento final es necesario mantenerse con firmeza y conservar la identidad de creyentes, viviendo fielmente el seguimiento de Señor como los apóstoles, los mártires de las persecuciones y los mártires de la vida diaria. 

Esta parábola nos muestra que Jesús no estaba esperando ya no más el fin del mundo y la llegada del Reino de Dios en su plenitud. La comparación de la red llena de peces buenos y de los malos que se tiene que separar para que se guardan los buenos y se arrojan al horno encendido los malos nos enseña que hay dos tiempos de la Iglesia: un tiempo aquí y ahora y el otro luego después y arriba con Dios en la trascendencia. La Iglesia peregrinando juntos acá y la Iglesia llegada a la casa del Padre. La Iglesia militante en la lucha y la Iglesia triunfante. La Iglesia con los muchos pecados de sus miembros y la Iglesia, esposa del Cordero en su resplandor (Apocalipsis 21, 9.11). La Iglesia aquí y ahora es fácil de criticar por sus faltas en todos los bautizados, comenzando con nosotros. Me da mucha pena cuando un bautizado critica a la Iglesia, porque se está criticando a sí mismo. Hay una oración que dice: “Señor renueva a tu Iglesia y comienza conmigo”. Es que Iglesia somos todos los bautizados que debemos dar testimonio de palabra y vida o como nos animaba Papa Francisco en el mes de octubre “bautizados y enviados”.

En este mes oremos por la Iglesia Diocesana de Sucre en su fundación:” Te alabamos Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe y la vivamos en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” (lema)

Este mes el Papa pide orar por nuestras familias. Recordamos la Preciosísima Sangre de Cristo. Oremos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, salva a nuestras familias, y al mundo entero!

El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo! 

Y la Bendición del Dios uno y trino, del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo descienda sobre ustedes y les acompañe hoy y siempre.



Monseñor Adolfo Bittschi
Obispo Auxiliar de Sucre
Resp. Área Misión C.E.B.

miércoles, 29 de julio de 2020

Cuando servimos a nuestros hermanos, lo hacemos a Cristo mismo, Mons. Adolfo Bittschi

 

29 de julio 2020, miércoles, celebramos la Fiesta de Santa Marta 
Proclamamos el Evangelio según san Juan 11, 19 - 27. 
Gloria a ti, Señor. 

Santa Marta aparece tres veces en el Evangelio: en el banquete de Betania en que junto con su hermana María, recibe a Jesús en su casa; luego cuando la resurrección de su hermano Lázaro, hace profesión de su fe en Jesús “el Hijo de Dios”, y en la comida ofrecida a Jesús seis días antes de la Pascua (Juan 12,2). En los banquetes, Marta como hermana mayor asumiendo el rol de madre de familia se ocupa del servicio, en tanto que María unge los pies y la cabeza del Señor con el perfume preciosísimo y se sienta a los pies del amado Maestro para escucharle. Cuando Marta se queja a Jesús de que su hermana no le ayuda, el Señor no rechaza “su solicitud caritativa”, pero la corrige por su inquietud y agitación, que tiene el peligro de dejar de lado lo esencial, que es su presencia ante Él. Jesús invita a Marta a una mayor renuncia, a fin de que se encuentre menos absorbida: “Pocas cosas son necesarias, y aún una sola”, puesto que estar con Él vale más que quedarse al margen, aun cuando fuese por ocupaciones excelentes: “Ella ha elegido la mejor parte”, dice Jesús de María, que no está “ociosa”, sino “atenta”. Que honor grandísimo para Marta el recibir a Jesús el amado Maestro y Señor a su mesa y servirle. Pero no es de envidiar a Marta, porque cada uno de nosotros puede a su vez, ejercitar la misma hospitalidad: cuando servimos a nuestros hermanos, lo hacemos a Cristo mismo (Mateo 25,40).

El evangelio de hoy expresa la fe de Marta y de los judíos de su época: creen en “la resurrección del último día” (v. 24); pero ahora comprende que con Jesús ha llegado la etapa final de la historia de la salvación y que la resurrección comienza a suceder gracias a la fe en el Mesías Jesús, que hace pasar ya no más de la muerte a la vida. La revelación central del Evangelio Jesús lo manifiesta a Marta, su amiga afligida y dolorida: “Yo soy la resurrección y la vida” (v. 25). Esta novedad transcendental irrumpe en el tiempo y en la historia presente de cada persona por la fe en Jesús el Cristo, es decir el Mesías, el Ungido con el Espíritu Santo e Hijo de Dios hecho hombre. Este camino de adhesión y unión progresiva con Cristo culminará en el encuentro definitivo con Jesús después de la muerte.

En este mes oremos por la Iglesia Diocesana de Sucre, la primera de Bolivia:” Te alabamos Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” (lema)                                                     
   El Papa pide orar por nuestras familias. Rezamos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, a nuestras familias, y al mundo entero!  
 
  El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo!
 Y la Bendición del Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y sus familias y les acompañe hoy y siempre.

Mons. Adolfo Bittschi 
Obispo Auxiliar de Sucre 
Resp. Área Misiones C.E.B.

martes, 28 de julio de 2020

Es importante de hablar de los cambios en la vida y dar testimonio para la conviersión

Encuentro Nac. de Pastoral Juvenil Vocacional 2020

28 de julio 2020, martes de la décima séptima semana durante el año litúrgico
Proclamamos el Evangelio según san Mateo 13, 36 - 43. 
Gloria a ti, Señor. 
     


PACIENCIA y SABER ESPERAR 

No para juzgar sino para salvar vino Dios al mundo

La parábola de hoy, querido oyentes, nos hace entender porque en el mundo creado por Dios bien y hasta muy bien (Génesis 1) existe la luz, lo bello, lo bueno, lo verdadero, el edificar y el amor, pero a la vez lo oscuro, lo feo, lo malo, la mentira, la destrucción, la enfermedad y el odio. Todo lo bueno y hermoso es obra de Dios. Pero como Dios había creado seres invisibles, los ángeles, como profesamos en el Credo Niceno-Constantinopolitano, los ha creado libres y los ha puesto a prueba para saber si van a creer y amar a Dios libre y voluntariamente o para  destruir la obra de Dios y rechazar y odiar a su Creado. Una parte de cada uno de los nueve coros de ángeles se rebeló contra Dios y de seres buenos se convirtieron en malos y malignos. Y uno de sus jefes el diablo es él que siembra la cizaña.

Y al querer extirpar de una vez la cizaña dice el dueño del campo, que no. Que dejen crecer juntos lo bueno y lo malo. Recién al fin, es decir al fin del mundo se va a realizar la separación de la cosecha y de la maleza. Se trata de una comparación que no permite lo que en la vida de los hombres es posible por la gracia de Dios, es decir el cambio o mejor la conversión de una hierba mala en buena y al revés, que una semilla buena deja de producir y queda vacío.

Tenemos los ejemplos de cuantos Santos en la Sagrada Escritura que muestran este cambio. El rey David había cometido muchos pecados, hasta adulterio y asesinato, pero no había acusado a otros. Ha reconocido siempre su propia culpa, se ha arrepentido y pedido perdón a Dios. No así su hijo Salomón que, como hemos escuchado en la lectura del domingo pasado, comenzó muy bien pidiendo de Dios sabiduría, pero terminó mal en la idolatría.

Por eso es tan importante de hablar de los cambios en la vida y dar testimonio para que los pecadores se conviertan y no serán arrojado al horno de fuego en el infierno. Dios tiene mucha PACIENCIA y SABE ESPERAR la conversión. Y a su hijo lo mandó al mundo no para juzgar sino para salvar al mundo.

En este mes oremos también por la Iglesia Diocesana de Sucre, la primera de Bolivia:” Te alabamos Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” 

 El Papa pide orar por nuestras familias para que sean acompañadas con amor, respeto y consejo. Rezamos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, a nuestras familias, y al mundo entero!

El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo!  
      
  Y la Bendición del Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y sus familias y les acompañe hoy y siempre.

Mons. Adolfo Bittschi
Obispo Auxiliar de Sucre
Resp. Área Misiones C.E.B.

lunes, 27 de julio de 2020

EN DIRECTO CELEBRACIÓN CENTRAL DEL SEMINARIO SAN CRISTÓBAL



El Seminario Conciliar "San Cristobal" celebra a su patrono por su plataforma de facebook


El día de hoy, la iglesia celebra a San Cristóbal. En la Iglesia de Sucre, San Cristóbal es  patrono del Seminario Conciliar de nuestra Arquidiócesis.
Las celebraciones en el Seminario se  iniciaron el día viernes con un triduo y culmina hoy a las 18:00 horas con la Eucaristía  a través de la página de Facebook  Seminario Conciliar "San Cristóbal" Sucre-Bolivia 




Historia del Santo
Cristóbal significa "el que carga o portador de Cristo".

San Cristóbal, popularísimo gigantón que antaño podía verse con su barba y su cayado en todas las puertas de las ciudades: era creencia común que bastaba mirar su imagen para que el viajero se viese libre de todo peligro durante aquel día. Hoy que se suele viajar en coche, los automovilistas piadosos llevan una medalla de san Cristóbal junto al volante.

sábado, 25 de julio de 2020

El que tiene a Dios, lo tiene todo


26 de julio 2020, decimoséptimo Domingo durante el año litúrgico.
Proclamamos el Evangelio según san Mateo 13, 44 - 52. 
Gloria a ti, Señor.    
     

Palabra del Señor, gloria a ti Señor Jesús


VENDE TODO LO QUE TIENE Y COMPRA EL CAMPO

El Evangelio de hoy, queridos oyentes, nos trae tres parábolas: el tesoro escondido, la perla fina y la red barredera que recoge toda clase de peces. Y termina con la explicación de las parábolas. La palabra “tesoro” es una palabra mágica que suscita imágenes misteriosas. Leyendas como el Gran Paititi, el tesoro de oro de los incas, y fabulas giran alrededor de tesoros escondidos y despiertan el deseo de encontrarlo para ser feliz. Para eso cuántos hombres han dejado su casa y su familia en búsqueda de la fortuna imponiéndose toda clase de privaciones. Tienen ante su vista un único objetivo: encontrar el tesoro fabuloso que les hace aguantar peligros graves en la esperanza que al encontrar el tesoro pueden liberarse de todas las molestias y preocupaciones para el resto de su vida.

Jesús habla de esta clase de tesoro. Alguien tiene esa suerte y lo halla casualmente; reconoce su valor y cava más hondo para esconderlo. Se llena de alegría y luego hace algo que a sus amigos y vecinos que le observan, les hace menear la cabeza porque les parece una locura: Vende todo lo que tiene: su casa, sus animales, sus herramientas, los muebles, la ropa, frazadas, las ollas, los enseres todos. Es que necesita vender todo para conseguir el dinero y poder comprar el terreno, donde está escondido el tesoro. Este requiere una inversión alta, mejor dicho una inversión total porque  vale muchísimo más que todas sus pertenencias. Y lo raro a la vista de sus familiares y vecinos es que lo hace con mucha alegría; parece que se ha vuelto loco. 

Y en verdad es la inmensa alegría de haber encontrado el tesoro que le induce a la inversión de todas sus cosas. No se calcula con la mente fría porque todo lo que tiene no es nada en comparación del tesoro escondido. Este tesoro es el Reino de Dios o en otras palabras, es Dios mismo en persona. El que ha encontrado a Dios mediante las palabras de Jesús, es capaz de renunciar con alegría a todo lo demás. Ha encontrado la verdad y la vida. El que tiene a Dios, lo tiene todo. O como decía Santa Teresa de Jesús: “Solo Dios basta”. Nuestra mentalidad mundana con el temor de perder algo nos hace tropezar una y otra vez y perdemos a Dios y así todo.

La parábola de la perla fina forma con la anterior una doble parábola sobre el mismo tema. Sin embargo trae matices nuevos. Aparte del valor enorme suscita la idea de una extraordinaria e inmaculada belleza. El Reino de Dios no es solamente el mayor valor que existe, sino también lo más bello, hermoso y perfecto que se puede conseguir. El otro aspecto es que en la parábola del tesoro escondido se muestra la buena suerte de una persona por casualidad en su trabajo agotador y diario. O sea se trata de personas cansadas y agobiadas que por suerte se encuentran con Jesús sin el afán ni la intención de encontrar un tesoro que vale la pena de dejar todo. Aquí se trata de una persona que busca con todo el corazón, pensamiento y deseo lo bello y verdadero, como Nicodemo, que viene a buscar a Jesús (Juan3, 1ss). Acá se habla de un comerciante experto en joyas. Nunca había encontrado  una perla tan fina y preciosa. Sin hacer cálculos va a vender cuanto tiene en su negocio para adquirir esta perla. Sabe que esta perla recompensará la inversión. El corazón del hombre se queda intranquilo, hasta que encuentra el “tesoro” o “la perla”. San Agustín lo describe en sus Confesiones: “Nos hiciste para Ti y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en ti”. Pero cuando ha encontrado la perla fina, está dispuesto a entregarlo todo por causa de este único objeto tan valioso. Jesús no suaviza en nada, pero muestra el atractivo y la alegría que produce el hallazgo de la SALVACIÓN. Cuando lo hemos encontrado, hemos de procurar permanecer con la fascinadora alegría del descubrimiento. Cuando nos dedicamos a la búsqueda, no podemos descansar hasta haber encontrado lo que buscábamos. Estas dos parábolas nos hablan del tiempo presente, de la oferta que Dios le hace al hombre por el Mesías.

La parábola de la red barredera, que sigue, nos habla del tiempo futuro. Se echa al lago una red que se extiende entre dos barcas y así es arrastrado un buen trecho. Al estar llena la red se la saca a la tierra para revisar el resultado. La red barredera recoge pues peces y fruta del mar de toda clase y calidad. Hay que saber que la Escritura clasifica entre peces y animalitos puros e impuros, es decir comestibles y otros que no sirven. Así que hay que separar los buenos que se recogen en canastas y los malos que se echan afuera. El Hijo del hombre, el Mesías y Salvador, es el gran pescador a quién nadie se escapa. Al final revisa la pesca para separar y guardar lo que sirve y echar afuera los malos. Obvio que habla del juicio final cuando “dará a cada uno conforme su conducta” (16, 27). Nosotros podemos equivocarnos al ver y juzgar. El Hijo de Dios conoce los corazones lo hará con justicia, misericordia y santidad.

En este mes oremos también por la Iglesia Diocesana de Sucre, la primera de Bolivia:” Te damos gracias Señor y te alabamos por la diócesis de Sucre Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe que nos hace Iglesia y nos convoca a vivir en comunidad”. “Somos Iglesia  sinodal en salida misionera” (lema)

 El Papa pide orar por nuestras familias para que sean acompañadas con amor, respeto y consejo. Rezamos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, a nuestras familias, y al mundo entero!

El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo! Y la Bendición del Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y sus familias y les acompañe hoy y siempre.

Mons. Adolfo Bittschi: Santiago, “hijo de trueno” es el primero de los Apóstoles en ofrecer su vida por el Señor


25 de julio 2020, sábado, celebramos la Fiesta de SANTIAGO, apóstol, y proclamamos el Evangelio según san Mateo  20, 20 - 28. 
Gloria a ti, Señor.   



                                            USTEDES  BEBERÁN DE MÍ  CÁLIZ

Santiago, hijo de Zebedeo y de Salomé, pescador del lago de Genezaret, compañero de trabajo de Pedro y de Andrés. Con Pedro y su hermano Juan pertenece a los más cercanos apóstoles de Jesús, testigos únicos de acontecimientos extraordinarios del maestro: la resurrección de la hija de Jairo, de la transfiguración del Señor en la montaña alta y escuchar la voz de Dios Padre: “Este es mi Hijo amado escúchenlo”, y en el huerto de los Olivos presenciaron la agonía de Jesús. Santiago es el primero de los Apóstoles en ofrecer su vida por el Señor y su Evangelio por el año 43 o 44 en Jerusalén (Hechos 12,2). Así se cumplió la predicción del Señor de “beberán mí cáliz”.

El Señor llamó a Santiago junto con su hermano Juan en su trabajo diario remendando las redes. En seguida dejaron a su padre, Zebedeo, en la barca con los trabajadores  y se fueron detrás de Jesús (Marcos 1, 19s) que los hizo “pecadores de hombres” (Mateo 4, 19).

Una vez caminando con el grupo de Jesús hacia Jerusalén y pasando por un pueblo de samaritanos que no querían alojarlos, Santiago y su hermano Juan se enojaron tanto que querían pedir fuego del cielo, como el profeta Elías en su tiempo, como castigo. Por eso Jesús los llamó “hijos de trueno”.  En esa primera etapa de caminar con Jesús mostraron también sus intereses muy terrenales y personales. Su Madre hablo de eso con Jesús al pedir los primeros puestos para sus hijos en el esperado gobierno del Mesías.

Una vez convertido, sobre todo por la Resurrección de Cristo y el envío del Espíritu Santo cambió su vida totalmente. Fue gran misionero que caminó a predicar hasta “finis terrae”, lugar en España donde termina el continente Europeo y que en aquella época era tomado como fin de la tierra.  Seguía fielmente a Jesús dando testimonio de la muerte y resurrección de Jesús hasta derramar su sangre. Gran intercesor delante de Dios y por eso muy venerado. 

De Santiago tenemos una carta donde escribe: “¿De qué le sirve a alguien decir que tiene fe si no tiene obras?” y esta última palabra: “sepa que el que convierte a un pecador de su mal camino salvará su vida de la muerte y obtendrá el perdón de una multitud de pecados” (5, 20).

En este mes recordamos la fundación de la Iglesia Diocesana de Sucre: ”Te alabamos Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe que nos hace Iglesia y nos convoca a vivir en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” (lema)
Con el Papa oramos por nuestras familias. Recordando la Preciosísima Sangre de Cristo oremos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, salva a nuestras familias, y al mundo entero!   

El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo!          

Y la Bendición del Dios uno y trino, del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo descienda sobre ustedes y les acompañe hoy y siempre.

viernes, 24 de julio de 2020

EL QUE ESCUCHA LA PALABRA Y LA ENTIENDE, ÉSE DARÁ FRUTO


 24 de julio 2020, viernes de la 16ta. Semana durante el año litúrgico.
Proclamamos el Evangelio según san Mateo 13, 18 - 23. 
Gloria a ti, Señor.   


REFLEXIÓN

Jesús da la explicación de la parábola del sembrador: el Reino de Dios comienza acá abajo con las sencillas palabras de Cristo. La acogida que les den o les niegan los oyentes en sus corazones les convertirá o no, en participantes del Reino de Dios.

Hay diferentes causas de no escuchar el mensaje de Jesús. 
1. Hay personas que son como impermeables para la Buena Nueva. No entienden nada. Son como el terreno pisado como camino que pasa por la chacra y que está demasiado duro. Son personas que se habrán dejado cautivar por el mundo, la carne y el demonio y por eso su corazón se ha endurecido. Su sensibilidad por lo religioso se ha perdido. Se han cerrado conscientemente y ya no quieren escuchar la Palabra de Dios. De esto dice Jesús: “Viene el maligno y roba lo sembrado en su corazón”. 
2. El terreno pedregoso  se refiere a los que escuchan el Evangelio y primero lo aceptan de buena gana, pero como no tienen raíces, son inconstante y en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, sucumben. 
3. Lo sembrado entre zarzas significa que son personas que aceptan y meditan la Palabra de Dios y orientan su vida según la luz de Cristo. Se conviertan en verdaderos  cristianos. Sin embargo, con el correr de los tiempos, otros intereses se imponen. Así que su pensar, querer y sentir material ahoga la Palabra de Dios. Es un proceso lento, casi desapercibido, de secarse y finalmente morir a la vida de gracia. 
 
También la gracia tiene diferentes grados de responder y producir fruto:
 Jesucristo habla de un rendimiento de cien o sesenta o treinta por uno. Buen rendimiento dan los fervorosos que a diario luchan a superarse a sí mismo, reconociendo sus debilidades. Los que superan a todos en su rendimiento son los santos que en su entrega total saben que no es el propio esfuerzo, sino la gracia de Dios, a la que se debe invocar cada día y que produce de por sí.
En resumen: Muchas adversidades se oponen a la escucha de la Palabra de Dios, sin embargo ella jamás terminará den++ derrota. Por eso no debemos desanimarnos de dar testimonio con fe y esperanza.

En este mes recordamos la fundación de la Iglesia Diocesana de Sucre: ”Te alabamos Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe que nos hace Iglesia y nos convoca a vivir en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” (lema)

Con el Papa oramos por nuestras familias. Recordando la Preciosísima Sangre de Cristo oremos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, salva a nuestras familias, y al mundo entero!   

El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo!          Y la Bendición del Dios uno y trino, del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo descienda sobre ustedes y les acompañe hoy y siempre.


Mons. Adolfo Bittschi
Obispo Auxiliar de Sucre
Resp. Área Misión de la C.E.B. 

jueves, 23 de julio de 2020

El misterioso del Reino de los cielos, solamente lo conocerá el oyente interesado de verdad

23 de julio 2020, proclamamos el Evangelio según San Mateo
Gloria a ti, Señor.   

Reflexión 

Queridos oyentes  seguimos con la actividad misionera del mesías  en Galilea. 

Estamos en el capítulo 13 del evangelio según San Mateo que nos presenta el tercer discurso de Jesús: las parábolas. Ya conocemos los primeros 2 grandes discursos: el discurso evangélico del sermón de la montaña y las bienaventuranza es (Mateo 5 a 7 ) y el discurso apostólico con la instrucción y el envió de los doce y  el relato de su misión (Mateo  10).

 Jesús al inicio del capítulo 3,  había presentado en la parábola del Sembrado y ahora se acercan a los discípulos para preguntar por qué habla en PARÁBOLAS a las multitudes. Los discípulos entienden que es cómo un lenguaje secreto, no cómo una instrucción abierta acerca del Reino de Dios. Es una pregunta que se origina porque la proclamación del Reino de Dios por parte de Jesús no ha sido entendida ni aceptada por la gente y por eso no produjo fruto. Jesús contestó con una frase difícil de entender: "A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del Reino de los cielos, pero ellos no". Se habló de los misterios pero no se aclaran lo que es en realidad el Reino de Dios, ni se dice que son los  misterios del reino.  El misterio solamente lo conocerá el oyente interesado de verdad, al que desde arriba  le será dado.  Queda claro,  que es cuestión de elección y de gracias, puro obsequio . En Éxodo 33, 19 dice: "yo usaré de misericordia con quien quiera quiere  y daré gracias a quien me plazca". 

Aquí San Mateo añade, la palabra por qué al que tiene  se le dará y tendrá de sobra."Recibimos gracias sobre gracias", dice San Juan 1, 16. Mientras la persona que no tiene nada de la gracia de Dios, tal vez por lo que no quiere o piense que no necesita, se le quita lo poco que piensa tener. Esto se refiere al día  del juicio final, del infierno que Jesús a menudo describe poniéndolo ante nuestra mirada. 

La disponibilidad de la escucha lo otorga el mesías a quienes se hacen su familia  (Mt 12,46 al 50) y optan por ser pequeños  humildes ( Mt. 11, 25).

 En este mes oremos también por la Iglesia Diocesana de Sucre, la primera de Bolivia: ”Te alabamos, Señor, por la Arquidiócesis de Sucre. Haz que, unidos  por la Palabra y la Eucaristía, y llenos del Espíritu Santo, vivamos con alegría la fe que nos hace Iglesia y nos convoca a vivir en comunidad”. “Somos Iglesia sinodal en salida misionera” (lema)

 El Papa pide orar por nuestras familias para que sean acompañadas con amor, respeto y consejo. Rezamos: ¡Oh preciosísima sangre de Cristo, sangre de nuestra salvación!   ¡Sálvanos a nosotros, a nuestras familias, y al mundo entero!

 El Evangelio es alegría. ¡Anúncialo! Y la Bendición del Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y sus familias y les acompañe hoy y siempre.

  

Mons. Adolfo Bittschi

Obispo Auxiliar de Sucre

Resp. Área Misiones C.E.B.

 

VIVO CONVERSATORIO: "LA MISIÓN DE LOS LAICOS EN EL MUNDO"



Conversatorio: LA MISION DE LOS LAICOS EN EL MUNDO

Material para nuestra participación

18:00 ORACION POR LOS LAICOS DE NUESTRA ARQUIDIÓCESIS

Lectura del Evangelio de Mateo 20, 1-16

Video del Papa Francisco sobre los laicos 


 


Oración por los laicos:

 

Señor Jesús, te damos gracias por el don de la vida. En este tiempo de pandemia, socórrenos y protégenos en tu misericordia. Con confianza nos abandonamos en tus amorosos brazos, recordando las palabras de tu Hijo Jesús: No se turbe su corazón; crean en Dios, crean también en mí. Yo he vencido al mundo”.

 

Te damos gracias Señor, por tantos laicos que comparten con los sacerdotes el camino de la vida y la solidaridad en el tiempo presente. Ayúdanos a enfrentar esta emergencia sanitaria con responsabilidad, serenidad y coraje, estando dispuestos a asumir, si fuera necesario, grandes sacrificios en nuestra vida cotidiana por el bien común.

 

Protege de todo mal a todos los laicos médicos, enfermeras y todo el personal de salud; seguridad y limpieza que se dedican a cuidar a la población y aliviar el sufrimiento causado por este mal. Dales luz y fuerza para que sigan dedicándose generosamente a su misión.

 

Fortalece a las familias, que están acompañando a sus padres, abuelos, hijos, parientes, amigos… afectados por el Covid. Fortalece Señor a los que cuidan de los ancianos que no pueden salir de casa por el riesgo al contagio. Mira con predilección a las familias más necesitadas que sobreviven con escasos recursos económicos, sin empleo, sin asistencia social y acceso a un diagnostico, atención y tratamiento médico oportuno.

 

Señor Jesús, fortalece el amor y la comunión en nuestras familias domésticas que conforma la familia más grande: nuestra Iglesia Arquidiocesana, para que seamos testimonio de la presencia de Dios en medio de esta pandemia, para que seamos testimonio del sentido de responsabilidad, de la solidaridad, de la prudencia, del compartir y de la ayuda mutua en medio de esta difícil situación.

 

Padre Misericordioso, en nombre de tu Hijo Jesucristo, derrama los dones de tu Espíritu Santo sobre los laicos y sobre nuestros pastores, para que crezcamos en la unidad, comunión y en nuestra vocación y misión en el mundo; para que vivamos nuestra identidad de Iglesia sinodal en salida misionera.

 

Amén.

 

18: 30 CONVERSATORIO: “LA MISIÓN DE LOS LAICOS EN EL MUNDO”


 Les invitamos al CONVERSATORIO "LA MISIÓN DE LOS LAICOS EN EL MUNDO"

HOY. Horas 18:00

Unirse a la reunión Zoom

https://us02web.zoom.us/j/87897344868


ID de reunión: 878 9734 4868


Documento: Exhortación Apostólica Post-Sinodal CHRISTIFIDELES LAICI de su  Santidad JUAN PABLO II sobre la VOCACIÓN Y MISIÓN DE LOS LAICOS EN LA IGLESIA Y EN EL MUNDO.

 

Link: http://www.vatican.va/content/john-paul-ii/es/apost_exhortations/documents/hf_jp-ii_exh_30121988_christifideles-laici.html

 


Jesús compasivo que insta a: “Consuelen, consuelen a mi pueblo”- Mons. Adolfo Bittschi

Entrega de Alimentos en comunidades rurales  2020 2 de agosto 2020, décimo octavo Domingo durante el año litúrgico Proclamamos el Evangelio ...